Somos Sol y Nico, padres de un Border Collie de 2 años y medio con un nivel de energía enorme, y una personalidad super juguetona, Ziggy Stardust.
Hace un año vivíamos en todo el centro de Barcelona, en Balmes con Diagonal. El vivir en esta zona, y no tener coche, nos hacía muy difícil poder llevar a Ziggy a zonas y lugares donde poder descargar su energía, correr a sus anchas, y no estar excesivamente sobre estimulado por coches, bicis, patinetes, etc.
Dimos con Vinyacan por una casualidad, honestamente no recuerdo cómo, pero ha de haber sido por una publicidad en Instagram, o tal vez al ver pasar la inigualable van negra por la ciudad.
Nos pusimos en contacto con el equipo, Laura y Deborah. Ellas fueron muy atentas en explicarnos todo, el funcionamiento del centro y las condiciones. En ese momento pensé, y estaba en lo correcto, que habíamos dado con un paraíso para nuestro perro.
Como estábamos en Covid, no pudimos ir a conocer el lugar. Les dimos la confianza y a hoy, no hemos tenido ninguna queja ni ningún inconveniente. El Ziggy ha ido a Vinyacan ya por un año y algunos meses, y siempre espera con emoción el día que le toque.
Estando allá, bien sea un día de guardería, o varios días por residencia, Sol y yo estamos completamente tranquilos de que Ziggy estará perfectamente cuidado, alimentado y con todo el cariño que requiere (y merece). Lo vemos en las fotos y videos que constantemente nos envían: corriendo y jugando con otros perretes, haciendo trabajos de olfato, nadando como un perro-pez en la piscina natural que tienen. Indiscutiblemente, se la pasa de maravilla.
El ver a tu perro en tan buenas manos, con esa emoción y felicidad indescriptible de montarse en la van para ir al centro, te deja una sensación de paz y tranquilidad de saber que has encontrado el lugar indicado donde mandar a tu perrete a pasar un día, o bien dejarlo por una temporada cuando estás de vacaciones.
El efecto vinyacan es muy positivo, tu perro llega a casa tranquilo de un día de estar feliz.
Ahora, el equipo de vinyacan es inigualable. Sara, Deborah y Laura son super atentas a todas las necesidades de los perros, al igual que a las de los humanos.
